Y quién lo diría, acá estamos, a punto de pisar el 2026. (UFFF levante la mano quién llegó con lo justo :p)

Así que voy a hablarte a vos.. Pero de frente, de persona real a persona real.
Sí, a vos que llegaste hasta acá, leyendo esto, apunto de empezar un año nuevo con esa mezcla que conocemos todos de cansancio, alegría porque se acercan las vacas, y ganas de que las cosas fluyan un poquiiiito más.
Antes de seguir, quiero decirte algo importante: ¡¡¡felicitaciones!!!
Y posta no lo digo como frase hecha ni como saludo automático. Felicitaciones de verdad.
Porque llegaste hasta acá.
Porque sobreviviste al año.
Y no deberíamos normalizar eso tan fácil.
Estar acá, de pie, firmes —aunque sea con sueño, con dudas— ya es un montón. Pasaron cosas que no estaban en el plan, aprendiste cosas que no pediste aprender y, aun así, seguiste. Eso merece celebrarse.

El balance real (no el prolijo)

Viste que cuando termina el año solemos hacer balances perfectos, prolijos, casi como si fueran para mostrar.
Yo me pregunto: ¿QUIÉN INVENTÓ ESO???? Quisiera hablar con esa persona..... jajajaja.
Pero los balances reales son bastante más desordenados. Están llenos de aprendizajes inesperados, de intentos que no salieron como queríamos, de decisiones que hoy miramos con más comprensión que juicio.
No todo fue como lo pensabas.
No todo salió.
Y aun así, creciste.

Permitite disfrutar

Por eso quiero proponerte algo simple: Permitite disfrutar. Permitite descansar. Permitite fluir. No todo tiene que resolverse ahora ni arrancar el primer día del año. Existen los días normales. Existen los momentos de calma. Existen las semanas tranquilas en las que no pasa nada espectacular… y eso también está bien!!!
Y en esa calma, deseo que puedas mirar un poco más alrededor.
A lo que te rodea. A las personas que están ahí.
A esos flashes que parecen chiquitos pero son enormes: una risa compartida, un mate que va y viene, ese café de la mañana que te tomás todavía medio dormida, una charla sin apuro, un abrazo largo, una mesa desordenada pero llena de gente querida.
Ahí pasa la vida.
Ahí está lo importante.

Somos proceso

Somos humanos. Somos proceso. Somos aprendizaje.
No somos una versión final ni una carrera contra nadie.
Hay una idea que a mí me acompaña mucho y que quiero dejarte por acá para que te acompañe a vos también.
Un sabio que conozco siempre decía: hay que pensar en lo que SÍ podemos hacer, no en lo que no.
No desde la exigencia, sino desde el cuidado. Desde corrernos un poco del “no llego”, “no puedo”, “no hice” y empezar a mirar con más amor todo eso que sí estuvo, que SÍ se sostuvo, que SÍ se pudo.
Quizás este año no sea para ir más rápido.
Quizás sea para ir más consciente.
Para elegir mejor.
Para disfrutar más lo cotidiano.
Para darle más valor a lo simple.
No hace falta arrancar con promesas enormes ni con listas infinitas. A veces alcanza con arrancar con un poco más de paciencia con vos y con ganas reales de estar bien.

Mirar lo que sí se pudo (también desde Santaclara)

Y te cuento algo más, ya que estamos hablando de mirar con más cariño lo que sí pasó.
Esto también nos pasó puertas adentro de Santaclara.
Porque somos un equipo con MUUUUUCHAS ideas. Todo el tiempo estamos creando, pensando, imaginando cosas nuevas, hablando entre nosotrxs sobre cómo mejorar, qué cambiar, qué probar.
Y este año hicimos algo distinto.
Frenamos un segundo y dijimos: “CHE, miren todo lo que pasó”.
- Nueva tienda online.
- Creamos la línea Huella para mascotas.
- Hicimos acciones que nos sacaron de la rutina, como la acción de Facultades.
- Tuvimos lanzamientos de productos nuevos.
- Vivimos momentos lindos compartidos.
- Participamos de los Premios Ídolo.
- Hicimos colaboraciones súper piolas.
- Experimentamos cosas que no estuvieron en los planes también, claro. Pero sobre todo, mucho camino recorrido.
Y ahí volvió esa idea que a mí me acompaña tanto y que hoy quiero compartirte de nuevo: mirar lo que sí se pudo.
No para conformarnos, sino para reconocernos. Para decir “ok, no todo salió perfecto, pero hicimos un montón”.
Creo que eso aplica para todo. Para una marca, para un equipo, para una persona.
A veces estamos tan enfocadxs en lo que falta, en lo que no llegamos, en lo que quedó pendiente, que nos olvidamos de mirar todo lo que sí sostuvimos.

Feliz año nuevo

Y ahora sí, dicho todo esto: feliz año nuevo!!!!
Que este año venga con amor, con salud, con momentos compartidos, con risas sinceras y con muchos de esos instantes reales que después son los que más recordamos. Que te encuentre presente, acompañada y celebrándote un poco más.
Seguimos. Paso a paso.
Brindando por lo que fue, por lo que es y por todo lo que vendrá.
Ceci